CGT y Lycar: La represión sindical “viaja” desde otras ciudades a la estación de autobuses de Murcia
El sindicato CGT comienza en Murcia una campaña de protesta contra la “represión sindical” en una de las concesionarias de la estación autobuses de Murcia.
El grupo mercantil “Interurbana de autobuses, S.A.”, cuyo nombre comercial en Murcia es LYCAR, es una de las empresas concesionarias de las líneas de transporte regular y discrecional de viajeros. A día de hoy, asume la realización de rutas por toda la geografía regional entre las que se encuentran: Murcia-Cartagena, Murcia-Molina de Segura-Cieza, Murcia-Yecla, Murcia-Jumilla, Murcia-Águilas, y un largo etc.
Las relaciones entre la empresa y nuestra sección sindical de CGT, mayoritaria en LYCAR tras las pasadas elecciones del 11 de noviembre de 2015, son muy tensas en estos momentos. La situación que ahora se vive en Murcia, no es nueva en otras ciudades de España. De hecho, en Sevilla, esta misma empresa, bajo el nombre comercial de DAMAS, ha sido condenada en 2014 y en 2015 por vulnerar los derechos fundamentales de sindicalistas de CGT, llegándosele a obligar a pagar indemnizaciones de hasta 25.000 € por daños morales.
La empresa trató de impedir por todos los medios a su alcance que, de cara a las mencionadas elecciones sindicales del pasado noviembre, hubiera una alternativa electoral diferente a los sindicatos que ya estaban implantados en la mercantil.
Desde la sección sindical de CGT en LYCAR entendemos que los directivos de la empresa no tuvieron el menor reparo en despedir fulminantemente a nuestro compañero Jaime Rosillo, uno de los promotores de la sección sindical de CGT en la empresa y delegado sindical de la misma, tan pronto como se conoció que estaba dispuesto a participar de la mano del sindicato en las elecciones al comité de empresa. En días posteriores al despido de nuestro compañero Jaime Rosillo la empresa comenta en sus círculos privados que se he enviado un mensaje a la plantilla sobre donde no se debe de estar tratando de estigmatizar la afiliación y la lista de CGT a las elecciones.
El despido, que tuvo lugar el pasado 10 de octubre de 2015, 4 días después del comienzo del proceso electoral, fue fundamentado por la empresa en la necesidad de amortizar el puesto de trabajo de uno de los conductores de la ruta Murcia-Yecla. Desde esta sección sindical de CGT consideramos falso el pretexto de la empresa, puesto que el número de conductores asignados a esa línea no se ha reducido, sino que la vacante de Jaime fue cubierta inmediatamente por otros trabajadores.
Además de lo anterior queremos denunciar haber soportado una verdadera campaña de acoso y derribo durante el proceso electoral. Una vez presentada nuestra lista de CGT, algunos de sus integrantes sufrieron presiones de la dirección de la empresa para que la abandonaran antes de concluir el proceso, además, durante el mismo se cometieron irregularidades por parte de la empresa como, por ejemplo, no facilitar los sobres y papeletas a aquellos trabajadores que manifestaron su deseo de votar por correo, cuestión que es de obligado cumplimiento según la legislación vigente, mientras que a algunos empleados se les proporcionó transporte para que acudieran a la mesa electoral a depositar su voto.
Una vez celebradas las elecciones y constituido el nuevo comité de empresa, en el cual 3 de los 5 miembros elegidos pertenecen a CGT, los ánimos no se han calmado porque, tanto este órgano como la sección sindical de CGT en LYCAR, han denunciado la utilización fraudulenta de contratación a través de ETT y la ocultación ilegal al comité de la información referida a ese asunto.
El caso de nuestro compañero Jaime Rosillo en Murcia guarda similitudes con el de Loli Martín, conocida popularmente como “Loli Damas”, trabajadora de DAMAS y afiliada a CGT en Sevilla, que se ha visto afectada por cinco expedientes sancionadores y dos despidos en los últimos años, en todos los casos resueltos de forma favorable para la trabajadora en vía judicial. Y ello, sin olvidar la imputación por falso testimonio de dos de los jefes de la estación de autobuses de Sevilla, los cuales manifestaron en uno de los juicios que la trabajadora se había desviado de la ruta obligatoria sin justificación, resultando probado que ello se debió a una maniobra imprescindible de la conductora porque una parte del trayecto no era transitable por estar en obras.
Loli Martín denunció en su día ante la Inspección de Trabajo y de forma pública en el medio Canal Sur la realización de jornadas diarias de trabajo en DAMAS de hasta 15 horas y se quejó abiertamente de sufrir vejaciones por parte de sus jefes debido a su homosexualidad. Dentro de los paralelismos observados, se da que el despido de Jaime Rosillo se produjo solo 9 días después de que se conociera la sentencia que declaraba nulo por segunda vez el despido de Loli Martín.
En 2014, CGT visibilizó este conflicto en la ciudad de Sevilla con una manifestación que fue denominada “La procesión del Santísimo Coño Insumiso y el Santo Entierro de los Derechos sociales”, circunstancia que fue llevada a los tribunales por la Asociación de Abogados Cristianos.
En este caso, la federación local de CGT en la Región de Murcia y nuestra sección sindical de CGT en LYCAR estamos preparando, entre otras acciones, concentraciones de protesta en las estaciones de autobuses de Jumilla y Murcia los días 31 de enero y 12 de febrero respectivamente, así como un acto de apoyo a nuestro compañero Jaime Rosillo en la puerta de la Ciudad de la Justicia con carácter previo a la celebración de su juicio por despido el 25 de febrero. De la misma forma y acompañando a estas concentraciones se realizará una recogida de firmas para mostrar a LYCAR el rechazo al despido de Jaime y de la represión sindical.
Sección Sindical de CGT en LYCAR
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