CGT presentó en tiempo y forma alegaciones a ambos expedientes, cuyas observaciones han sido tenidas en cuenta para la denegación administrativa de la suspensión de más de tres meses que se pretendía ejecutar
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha emitido un comunicado para comunicar que ha tenido constancia de las dos resoluciones del Ministerio de Trabajo en las que le ha dado la razón en relación a los dos Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), “por fuerza mayor” del Grupo Ilunion, quedando ambos denegados desde este 21 de julio.
Según la organización anarcosindicalista, estos dos procesos iban a afectar hasta el mes de septiembre a un total de 1.856 personas, lo que viene a ser un 60% de su plantilla en activo de los centros de Ilunion Contact Center e Ilunion Contac Center CEE en todo el Estado. Además, en ambas resoluciones la directora general de Trabajo avala los argumentos de la CGT, que fueron corroborados por un informe preceptivo de la Inspección de Trabajo y no autoriza la agresión sin precedentes que suponían estos dos ERTE por FM del Grupo Ilunion (ONCE).
CGT recuerda que el Grupo Ilunion no aportó, a pesar de ser su obligación, ninguna prueba documental ni peritaje acreditando el ciberataque sufrido. Además, el Ministerio determinó que en una empresa perteneciente al sector de las telecomunicaciones, cuyo correcto desarrollo depende de las novedades informáticas, es esencia el grado de exposición al que se enfrentan a todo tipo de riesgos informáticos. En este sentido, los ciberataques, y más en el teletrabajo, son riesgos vinculados a la actividad del Contact Center, por lo que la empresa debe asumirlos como parte de su proceso productivo. De hecho, indican desde la organización anarcosindicalista, la autoridad laboral resalta que Ilunion ya contemplaba entre los riesgos empresariales la posibilidad de sufrir un ataque de estas características, dado que aportó certificados ISO en técnicas de seguridad y una póliz de ciberseguridad contratada, así como procedimientos y protocolos a seguir en estos casos. Por lo tanto, la previsibilidad del riesgo era conocida y no un caso de “fuerza mayor imprevisible”.
CGT también explica en su comunicado que en relación a esto, la autoridad laboral indicó que el ciberataque sufrido en ningún caso es un supuesto imprevisible y que la empresa, por lo tanto, tenía que haberlo contemplado y haber tenido un sistema alternativo. Los anarcosindicalistas advirtieron en su informe que “era una responsabilidad imputable a la empresa su falta de prevención tecnológica, algo que le ha llevado a no dar trabajo efectivo a la plantilla durante un determinado tiempo, cumpliendo deficientemente sus obligaciones contractuales por su culpa o negligencia. La plantilla, sin embargo, ha estado obligada a estar pendiente del ordenado y de su teléfono durante toda la jornada laboral, sin disfrutar permisos retribuidos”. La Dirección General del Trabajo ha confirmado esta cuestión al observar que las personas trabajadoras han estado en todo momento a disposición de la empresa, presencial o teletrabajando, y han informado sobre sus descansos, comienzos y finales de sus jornadas laborales, así como de citas médicas para poder ausentarse de sus puestos de trabajo en determinados momentos.
CGT ha apuntado que los abogados del Grupo Iluinion podrán realizar un recurso de alzada ante el Ministerio de Trabajo y posteriormente, en el caso de no obtener la razón, podrán acudir a la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional. En cualquier caso, desde la organización anarcosindicalista han manifestado que se continuará trabajando en la misma línea de defensa de los derechos de estas personas trabajadoras, por entender que sus intenciones solo buscan una flexibilidad al margen de lo que establece el Estatuto de los Trabajadores.