La sentencia, de 13 de noviembre de 2019, es un gran avance en materia de igualdad y de reconocimiento de derechos, y tiene efectos inmediatos en las empresas Majorel (Aplicando la sentencia de la AN de 11 de diciembre de 2017) y en GSS Line (Acuerdo de 7 de marzo de 2018 en la Audiencia Nacional que acordó vinculare al resultado de esta sentencia).
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha ganado el pulso en materia de igualdad a estas empresas del sector del Contact Center con más de 6.500 trabajadores y con centros de trabajo en casi todas las comunidades del Estado español.
Tras esta sentencia estas dos multinacionales, que habían elaborado sus Planes de Igualdad teniendo en cuenta solo a los trabajadores que contrataba directamente, tendrán que aplicar las medidas acordadas con CGT y el resto de los sindicatos a toda su plantilla, sin distinción alguna entre personas trabajadoras de empresas usuarias y trabajadoras que prestan sus servicios habiendo sido contratadas por distintas Empresas de Trabajo Temporal.
CGT rechaza las diferencias que las empresas realizan a la hora de aplicar los Planes de Igualdad y se ha visto obligada ha pedir el amparo de los tribunales para las medidas en materia de igualdad que acuerda se hagan extensibles a todas las personas trabajadoras sin excepción.
Es una sentencia histórica que, dado que se fundamenta en la Directiva 2008/104/CE, acorde con el derecho de la Unión Europea en el que la igualdad entre mujeres y hombres constituye un principio fundamental y la igualdad entre mujeres y hombres es un objetivo que debe integrarse en todas las políticas y acciones de la Unión y de sus miembros, tal como se expresa positivamente en las Directivas 2004/113/CE y 2006/54/CE. La CGT muestra su alegría por el Respaldo del Tribunal Supremo a esta demanda y continuará peleando por los derechos fundamentales de las trabajadoras y trabajadores del Contact Center.